El edificio que cayó solo: secretos enterrados en los escombros del WTC 7
commons.wikimedia
El 11 de septiembre de 2001, mientras el mundo entero observaba horrorizado cómo colapsaban las Torres Gemelas, un tercer edificio del complejo World Trade Center caía a las 5:20 de la tarde.
El WTC 7, de 47 pisos, no fue impactado por ningún avión. Sin embargo, se derrumbó de manera simétrica y vertical en cuestión de segundos. Fue la primera vez en la historia que un rascacielos con estructura de acero se desplomaba por incendios, según la versión oficial.
Pero lo que más llama la atención no es solo la forma de su caída, sino lo que había dentro de ese edificio.
El WTC 7 albergaba oficinas clave del aparato estatal y financiero de los Estados Unidos.
Algunas de ellas eran:
Comisión de Bolsa y Valores (SEC):
Tenía una de sus unidades más sensibles en este edificio. Allí se almacenaban miles de expedientes relacionados con investigaciones por fraude financiero, manipulación del mercado bursátil y corrupción corporativa. Tras el colapso, la SEC admitió haber perdido más de 3.000 casos activos, muchos de ellos vinculados a gigantes financieros como Citigroup, Enron, WorldCom, entre otros.
Departamento de Defensa (DOD):
Mantenía una oficina dedicada a contrataciones con empresas privadas. Allí se custodiaban documentos sobre licitaciones, contratos confidenciales con proveedores militares y tecnología sensible.
Servicio Secreto de los EE. UU.:
Tenía una operación de análisis financiero en el piso 9, dedicada a investigar lavado de dinero, delitos cibernéticos y transacciones vinculadas a organizaciones internacionales.
Oficina de Manejo de Emergencias del alcalde Rudy Giuliani:
Un búnker reforzado con ventanas a prueba de explosiones y un sistema de energía independiente, diseñado como centro de comando en caso de catástrofe. Sin embargo, fue evacuado esa misma mañana, horas antes del colapso del edificio.
IRS (Servicio de Impuestos Internos):
Con archivos sobre evasión fiscal de grandes corporaciones y personas políticamente expuestas. Parte de sus investigaciones en curso se desvanecieron junto con los archivos físicos.
Salomon Smith Barney (filial de Citigroup):
Ocupaba 17 de los 47 pisos del WTC 7. Esta firma era uno de los actores centrales en la emisión y colocación de deuda del Tesoro estadounidense, así como en el asesoramiento a grandes fondos de inversión internacionales.
Entre otras oficinas también se encontraban entidades como American Express Bank International, Standard Chartered Bank, y varias aseguradoras y firmas de inversiones.
Cuando se observa esta lista, es difícil no preguntarse qué impacto tuvo la destrucción del WTC 7 sobre las investigaciones en curso, las pruebas que jamás se recuperaron, y las conexiones que, al perderse, evitaron que se avanzara en procesos judiciales o sanciones económicas a grandes actores del sistema financiero.
Y como si todo esto no bastara, hay otro elemento que contribuye al escepticismo generalizado: las propias palabras de Larry Silverstein, el arrendatario del complejo WTC desde apenas siete semanas antes de los atentados. En una entrevista emitida por PBS en 2002, Silverstein declaró: “Tomamos la decisión de ‘pull it’ y luego vimos cómo el edificio colapsaba”. "Pull it" es un término que en jerga de demolición controlada significa literalmente "tirarlo abajo". Un colapso por decisión. Lo inquietante es que una demolición controlada de un edificio de 47 pisos no se improvisa en unas horas: requiere semanas de planificación, instalación de explosivos en puntos clave de la estructura y coordinación milimétrica. ¿Fue entonces realmente una decisión tomada ese mismo día, en medio del caos?
La explicación oficial del Instituto Nacional de Estándares y Tecnología (NIST) llegó en 2008, siete años después. Sostuvo que el derrumbe fue causado por incendios provocados por los escombros de las Torres Gemelas, que dañaron la infraestructura interna y desencadenaron una falla estructural crítica. Sin embargo, ningún otro edificio de acero en la historia moderna colapsó por incendios de oficina de manera tan uniforme y vertical, y varios ingenieros estructurales, arquitectos y bomberos han cuestionado públicamente esta conclusión.
Y hay un dato más que agrega una capa inquietante al relato
Curiosamente, Larry Silverstein, quien solía presentarse puntualmente todas las mañanas en su oficina del World Trade Center, ese 11 de septiembre no acudió. A último momento, según declaró, debió asistir a una cita médica impostergable con su dermatólogo. Sus dos hijos, que también trabajaban en el complejo, se retrasaron aquel día por razones menores, evitando por minutos estar en sus oficinas cuando los aviones impactaron.
Una coincidencia más en una jornada llena de "coincidencias" que terminaron marcando a fuego la historia del siglo XXI.
Pero no solo eso indica a Larry Silverstein como el hombre con más suerte en el mundo, sino que contrató un seguro contra actos de terrorismo pocas semanas antes del atentado. El 24 de julio de 2001, Silverstein Properties firmó el contrato de arrendamiento por 99 años sobre el complejo World Trade Center. Ese mismo día, suscribió una póliza de seguros por 3.550 millones de dólares, con una cláusula específica por daños causados por ataques terroristas, algo muy poco común para la época. Luego del atentado, Silverstein reclamó el pago por dos eventos separados, es decir, 7.100 millones, argumentando que el impacto de dos aviones debía considerarse como dos siniestros.
Tras una batalla legal con 24 compañías aseguradoras (incluyendo Zurich, Swiss Re, Lloyd’s of London y Travelers), finalmente cobró 4.550 millones de dólares.
Con ese dinero, reconstruyó el nuevo World Trade Center 7 en 2006, sin el menor rastro de las oficinas gubernamentales anteriores.
¿Casualidad o estrategia?
¿Colapso accidental o remoción deliberada?
¿Desastre fortuito o limpieza quirúrgica?
Las preguntas no buscan acusar. Solo invitan a pensar.
Porque en la geopolítica del poder y el dinero, la coincidencia suele ser una excusa elegante para no ver lo evidente.
El WTC 7 cayó solo. Pero no estaba vacío.
Y lo que desapareció con él, quizás fue mucho más valioso que su estructura de acero.
Referencias
ABC News. (2002, mayo 31). "9/11 files: Lost evidence from the attacks". ABC News. [https://abcnews.go.com/WNT/story?id=130645\&page=1](https://abcnews.go.com/WNT/story?id=130645&page=1)
National Institute of Standards and Technology. (2008). "Final report on the collapse of World Trade Center Building 7". U.S. Department of Commerce. [https://www.nist.gov/world-trade-center-investigation/study-faqs/wtc-7-investigation]
PBS. (2002). "America rebuilds" \[Documental]. Public Broadcasting Service.
Snopes. (2007, septiembre 8). "Fact check: Did Larry Silverstein admit WTC 7 was demolished on 9/11?" Snopes Media Group. [https://www.snopes.com/fact-check/building-7-collapse/](https://www.snopes.com/fact-check/building-7-collapse/)
Thornton Tomasetti. (2008). "World Trade Center 7 collapse investigation". Thornton Tomasetti. [https://www.thorntontomasetti.com/project/world-trade-center-7-collapse-investigation]
Wikipedia contributors. (2025, agosto 28). "7 World Trade Center (1987–2001)". In Wikipedia. [https://en.wikipedia.org/wiki/7\_World\_Trade\_Center\_(1987%E2%80%932001)]
Wikipedia contributors. (2025, agosto 30). "World Trade Center controlled demolition conspiracy theories". In Wikipedia. [https://en.wikipedia.org/wiki/World\_Trade\_Center\_controlled\_demolition\_conspiracy\_theories]

Comentarios
Publicar un comentario